
Sofia de Grecia se'n va a Miami
Sofía de Grecia va prendre una decisió contundent
Jaime Peñafiel hi torna. El veterà periodista ha aprofitat per parlar de la felicitació nadalenca dels Borbons Emèrits: “Nadie entiende que un matrimonio que no solo está separado porque siempre se han odiado y él, en exilio, firmen conjuntamente una felicitación navideña para todos los españoles. ¿Será el espíritu de la Navidad? Pues será”.
Peñafiel també explica què feia Sofía de Grecia quan el seu encara marit va fugir per cames a Abu Dabi: “Uno de los días más dramáticos de su vida, cuando su marido, el Rey Juan Carlos, marchaba al exilio por decisión de su hijo, ese día, precisamente ese y a esa hora en la que el Rey Emérito salía de su casa y de su país hacia Abu Dabi, a ella se le vio de compras en El Corte Inglés”.
Però la millor anècdota va passar fa més de 20 anys, quan Jaime de Marichalar va patir un ictus. Aleshores es van tapar els motius però sempre s’ha parlat d’una agitada vida nocturna de l’ex Duque de Lugo. Sofía de Grecia no va tenir pietat ni compassió vers un gendre que ja no queia gaire bé ni a la família ni a la societat i que havia quedat eclipsat per Iñaki Urdangarin, aleshores considerat el gendre perfecte.
Ho explica Peñafiel: “Cuando la Nochebuena del 2001 y como si no pasara nada, Sofía decidió mantener la cena aunque a esa hora la Infanta Elena, su hija, que entonces parecía amar a su marido, permanecía a solas en el hospital Gregorio Marañón con el rostro bañado en lágrimas, pegado a la cristalera que la separaba de aquel medio ser, que era Jaime de Marichalar, su marido. Dos días antes, el 22 de diciembre a las 19.30, había sufrido un gravísimo ictus cerebral, dejándole de ser quien era. A lo peor, Sofía como hoy es Felipe con su padre, pensaba que cada cual lleve su cruz. Así de egoístas y crueles suelen ser las familias reales”.